miércoles, 14 de diciembre de 2011

EL AMOR

El amor es complicado. Cuando eres joven y encuentras una tabla rasa es más fácil, si cuaja puede que sea para toda la vida, pero sólo es un quizás. Cuando maduras no puedes llamar al amor porqué no aparece. Entonces dedicas tu amor a lo que tienes a tu alrededor, tu familia, tu cotidianidad, tu repartes el amor entre los tuyos, te dedicas a repartir toda tu energía y amor a tus amigas de verdad, a esas que siempre están, no a las que pasan como satélites por tu vida contándoles tus problemas y cuando pasas algún momento duro desaparecen...esas no se merecen eso. El amor sublime se escuentra en el positivismo con el que haces las cosas. A veces una mujer inteligente lo tiene todo y no tiene nada...pero sí tiene el amor de los que la rodean y que la quierenel amor está en la esencia del ser que cada uno llevamos dentro...el amor no es entregar sino entregarse. Pero para mí, cómo católica que soy hay un amor sublime y único: el amor que Dios reparte entre todas sus criaturas. Sencillamente es cuestión de fe. Los que anteponemos a Dios antes que a todos sabemos que la vida, con sus sufrimientos se hace mucho más llevadero, y que la fe es lo que mueve el mundo. Sólo hay un camino para que el amor sea la esencia y ese único camino es Dios. Quien se apoya en el hombre se hunde, sólo hay que ver cuántas parejas se separan hoy en día y que pocas parejas de católicos se separan, eso es porqué su amor está renovándose poco a poco y día a día gracias a la fe que ponen n cuidar uno del otro y apoyarse en Dios en todo momento.
Mónica Rubio Ochoa
14-dic-2011

No hay comentarios:

Publicar un comentario