martes, 25 de abril de 2017

DICEN QUE LA CARA...

es el espejo del alma, totalmente de acuerdo, mi cara irradia alegría, bondad y generosidad y mi alma ídem. Me gustan los retos en los que tenga que usar la cabeza, no sé, yo ya hace años jugaba en red al trivial y me lleve un pequeño obsequio. También jugaba en red al "Cifras y letras". Me doy cuenta de que me he hecho mayor cuando recuerdo no sólo lo que hago ayer sino lo que hacía y lo que pensaba de muy pequeña. Por ejemplo, no entendía que a los mayores no les gustaran los dibujitos, y los días que pasaba con mis primos que eran los primeros amigos con los que contábamos. Y me gusta hablar, hablar de nada y de todo, de política, de "arreglar el mundo" , de las cosas normales que te pasan al día, de las amigas, las que siempre están, las intermitentes, y las que desaparecen sin más. Me gusta sentirme bien, y me siento pero que muy bien. Tengo una familia y unos padres que con nuestras pequeñas grescas y alegrías convivimos en paz y suficiente armonía. Y bueno, soy muy maniática, me gusta cuidar el más pequeño detalle en cualquier visita y soy muy agradecida. ¿algo malo? Empatizo demasiado y soy llorona, me emociona lo que "pasa en el mundo" pero también me alegro con pequeños caprichos que me doy a mi misma. Me suelo llevar bien con la gente y he sido y soy feliz trabajando o sin trabajar. Soy de las que piensa que la vida es la mejor escuela, pero también lo son los libros a los que he sido adicta muchas veces, ¡bendita adicción!. Siempre he sido respetuosa con los demás, y lo sigo siendo. No me gusta pensar en cosas tristes, y sé cuando retirarme a tiempo en alguna trifulca porque soy una tenaz discutidora pero no me gusta discutir. Me gusta mucho el cine, y las películas buenas sean españolas, americanas o de booliwood (o como se escriba). Mi religión es mi bandera y mi carta de presentación por mucho que la gente piense que está pasada de moda pero a mí...me sirve, y me reconforta, me anima, me enseña, y me da libertad. Y nada ya visteis la vista que tengo en la terraza de Cullera, preciosa playa a la que este año volveré antes, seguramente que el año pasado: sin humos de coches, con las olas relajantes, la arena húmeda al caminar, las tapitas, los puestos del paseo...me encanta ¿a quién no?. Y bueno estoy radiante, por lo que tal como he comenzado, voy a acabar: la cara es el espejo del alma, y yo tengo una cara radiante. Besos, seguidores mudos, no me seáis infieles me voy a estudiar y a "vivir bien", que yo como todo el mundo, nos lo merecemos: Mó 25-04-2017

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