Necesito la receta para confiar en la gente buena, no aquella gente que no me dice nada. Y bueno pasan por mi cabeza muchas cosas, y todas son pura creatividad, pura amistad, pura alegría, pura bondad y pura paz. Y bueno, sigo bien, en parte a veces algo decepcionada con este mundo tan incomprensible, pero sólo soy una pequeña pieza de ese puzle blanco llamado vida. He ganado una guerra particular y he dejado que la soledad pasara a mi vera dándole esquinazo- Voy ha hablar tal y como me siento: sencillamente soy una mujer con muchas inquietudes, con ganas de aprender cosas nuevas, y con ganas de disfrutar de nuevo de Cullera, que a Cullera y a Valencia es muy fácil quererlas. Y bueno, ¿Cuál es mi mejor arma? Físicamente supongo que son mis ojos y psíquicamente el cielo es el límite. He aprendido a dejar el lastre de la incomprensión y a respetarme a mi misma tal y como soy para luego ser comprendida. A veces las mujeres buscamos comprensión y algo de dulzura...¿y con qué nos encontramos? con gente de pocas miras y con gente que no nos corresponde tal y como sería nuestro deseo. En fin....paciencia, y a disfrutar de mi nueva decena de años...confío bastante en mi misma y vuelvo a tener grande la autoestima, me ha costado mucho llegar a este punto y me toca...saborear la vida. Os dejo por hoy, seguidores mudos, Besos mil.
Mónica Rubio Ochoa
20-03-2018
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