martes, 24 de marzo de 2020

HOLA....

Se me había ido el wifi pero ¡arreglado!. ¿Qué tal el confinamiento? Yo lo llevo bastante bien, un poco tengo la imagen de ser un ruiseñor en su jaula, como muchas y muchos. Pero sobre todo intentemos no salir a la calle, seamos sensatos.
 ¿En qué me refugio? Digamos más en quién.; primero en mi padre y hermanas, después en mis amigas, y por último en lo que nos dicen en la televisión y la radio. Procuro estar informada, siempre fui así. Y hay que ser valiente y entero para asimilar toda la desolación que estás sufriendo tantos enfermos y bueno, sangra mi alma y llora mi corazón . Yo me encuentro muy bien, muy entera, y bueno, ojalá pase este mal sueño. Otro refugio son las redes sociales en las que me gusta comentar las cosas que me pasan, son cosas triviales y con buen fondo, algo sencillo en mi manera de ver las cosas. Tengo buenos referentes y buenos genes gracias a Dios. Y bueno, por hoy nada más. Sigo creyendo en los milagros y en las historias de amor que empiezan y acaban bien. Y, nada, mi aplauso como todas las tardes a las ocho a los sanitarios, policías, ejército, guardia civil, funcionarios, conductores de autobuses, y tantos otros que son los verdaderos héroes y heroínas de la dificilísima situación por la que estamos pasando. Rezo, sí, rezo mucho, pero también busco momentos del día para relajarme leyendo o aprendo cosas y temas en el ordenador, me gusta todo aquello que me forme más como persona, no sé vivir sin música, y bueno, voy ha hablar de una palabra, esa es "la paciencia" que a mi me custa mucho porque soy un poco atolondrada. Y no tengo maldad, ninguna...así me va bien...¿por qué cambiar? Y si lo hago...qué sea a mejor!
Mónica Rubio Ochoa
24-marzo-2020

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