Aún me siento joven, sí, amigas y amigos, hay vida después de los cincuenta y me siento feliz, curiosa con la bella vida, con ganas de aprender y aprender más en mi intelecto. Pero lo que no soporto son las puyitas de unos y de otros, intentando hacerme flaquear, pues me hacen más fuerte y ser una mujer de paz, me trae alegría y sueños bonitos sobre la mar. Los sueños, soñar es maravilloso pero es un camelo, cuando te despiertas y sales a la calle, figúrate, a la gente le da por murmurar, pues, señores, hace falta ser tonto y tonta, pues murmurar esta muy feo de la gente a la que no se conoce. Otra cosa es el cotilleo blanco sobre los famosos de la televisión, del cine y del teatro: son gente que se expone por su trabajo, pero yo no pertenezco a ellos, solo soy una mujer más con un blog blanco y cristiano, que se apoya en muchas cosas, pero todas las que alimenten mi alma y mi mente. En fin, no quiero enfadarme, sólo quise explicarme, tengo muchas más cosas en que pensar. Sí, soy una mujer cada vez más seria, pero también más flexible y tolerante y sólo os digo que me gustaría que me trataran a mí como flexibilidad y tolerancia. Bueno una torpeza, algo que a la gente le "hace gracia" en mi puede ser dañino. En fin voy a tener una buena tarde, os dejo...¿Cómo sobrellevo mi cruz? Dejándosela a la Virgen y viviendo un poco.
7-05-2018
Mónica Rubio Ochoa
Seguidores mudos, chapeau por vosotros, por vuestro seguimiento, y porqué sé que sois buena gente la mayoría.
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