Con permiso de los duendes, seguiré escribiendo para mí y quizá me acordaré de callar cuando sea lo mejor para mí.
Con permiso de los duendes, me he empezado a divertir ¿Buena señal? Sí que sí
Con permiso de los duendes , seguiré siendo la mujer que soy, intentando ser feliz ¿Por qué no?
Con permiso de los duendes, seguiré la senda que un día empecé a trazar sin saber muy bien adónde podía ir
Con permiso de los duendes, el sentido común y la prudencia volvió, siempre vuelve a mí. Nada , seguidores mudos, la alegría vive en mi.
Mónica Rubio Ochoa
6-06-2018
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