SIN RENCOR

Se aprende a vivir sin rencor, perdonando a los demás y a mi misma. Es difícil actuar sin rencor, pero llega un punto en la vida en que se vive mejor así y el grado de felicidad es pleno. Es verdad que hay veces que las palabras hieren y que quizá es mejor olvidarlas para empezar una nueva etapa que comienza con buen humor  y que se continua con tesón e inteligencia. En el amor, soy una mujer normal en sus gustos, aunque hay hombres que influyeron en mi vida, para mal o para bien, hoy sigo siendo soltera, pero rrrrrrrrrrreeeeeeeeeeequuuuuuuuuueeeeeeeeeteeeeeee fellllllzzzzzzzzz, sigo escribiendo, y compartiendo con vosotros, algunos trocitos de mi vida, ¿a qué molo? ja,ja,ja. Bueno en verdad estoy contenta aquí en la bahía de Cullera, todo "funciona" en mi interior, y tengo que cuidarme el exterior. ¡oye, ¿os acordáis de los chiripitiflauticos? ConValentina y demás, los que os acordéis sois mínimo el 68 (buena cosecha, ja, ja, ja)Besos a todos del hada de todos los cuentos (tengo mucha fantasía):

Mónica Rubio Ochoa
6-10-2018