martes, 4 de diciembre de 2018

Sé que mi vida ha cambiado mucho, no digo que no, pero ha sido por causas personales, y en el amor nunca he acertado y a quien quiero no puedo tenerlo en mi vida, Sé que tengo que hacer muchos esfuerzos para tener a mi gente bien y que tengo un montón de responsabilidades para con ellos. Sé que el trabajo, aunque sea de casa me cuesta un poco de hacer. Sé que mi situación ha llegado ha ser grave aunque nadie prestara oídos y los que me oyeron sólo fuera para mofarse. Pero hay alguien que no me falla, y ese es Dios. ¿Por qué creo en Dios? ¿Y por qué no?. Hay en muchos aspectos de mi vida en los que estoy atada de pies y manos, pero he resurgido con más Fe que nunca. Y de verdad, que nadie me diga nada, odio es cotorreo barato contra mi persona. Sólo ved mi manera de actuar y si veis todo lo que he superado y la papeleta con la que me ha tocado lidiar, espero que más de uno bajéis la cabeza. El sentido de mi vida está reflejado en la mujer que soy hoy, con mis defectos, manías y obsesiones. Ah, ayer me compré dos plantitas, las voy a cuidar como oro en paño. Sigo siendo una piscis pura, y me muevo como el pescado bien en aguas turbulentas. ¡Viva la generación del 68! Es la mía, ja, ja
Mónica Rubio Ochoa
04-diciembre-2018

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