Es una pena que nos hayamos olvidado de las palabras bonitas: palabras de ánimo, palabras sencillas, palabras puras, palabras de corazón, palabras de amor. Vamos por la calle y no nos ponemos en lugar del otro, quiero decir, puede que hablemos mal de gente que no conocemos. Eso no es caridad, es mala idea. hay que olvidar, pero también hay que recordar que las ofensas ya lo dice su nombre...ofenden. Y bueno, en mi cabeza siempre hay palabras bonitas para el otro y creo que eso es bello, que no deberíamos ofender a nadie, sea cual sea su hándicap. Es tan, pero que tan fácil humillar...y es una pena la verdad. Sin embargo yo sigo levantándome con mi mejor sonrisa, pensando que el tiempo es oro, y que hay que hacer muchas cosas por los míos, que es hasta los que yo alcanzo. Pero en fin, yo sigo con los míos, con mi familia, que es una familia que nunca ha dado que hablar.
Ah, siento lo de Camilo Sexto, se va una de las grandes voces de España, descanse en paz.08-septiembre-2019
Mónica Rubio Ochoa
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