Hay muchas cosas que me emocionan: la risa de un niño, por ejemplo. Me emocionan las historias tristes y no puedo reprimirme y lloro, me emociona un bello amanecer de Cullera. Me emocionan las palabras amables. Me emociona la buena educación.
Estoy tranquilamente en Cullera. Todo lo bueno que hay en esta playa me encanta, y me gusta sentirme viva y creativa, enamorada o desenamorada, ¡qué más da!. Me siento en una nueva juventud, y es porqué me encuentro fantásticamente bien. Me estoy cuidando "mens sana in corpore sano", sólo era cuestión de tiempo para encontrarme bien. he llorado muchísimo, pero nunca perdí el sentido del humor. Y no quiero meteros un rollo patatero, sólo quiero deciros que en la vida hay tiempo para todo, mi tiempo ahora es para descansar, estaba agotada y ahora he recuperado tanto las ganas de vivir como la alegría. Besos, a todos los que me leéis:
Mónica Rubio Ochoa
20-junio-2020
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