WC

Hoy os tengo que contar una cosa...en la plaza del Oasis de aquí de Cullera, iba  a ir al wc y estaba cerrado el público. Pegado hay un Centro de salud. Con baño. Había una mujer fumando y hablando con su madre, fuera,  le he dicho que iba al baño y me ha dicho que no era público, y que no estaba claro que pudiéramos entrar. Me ha parecido de un egoísmo supino, y he entrado y al salir le he dicho a mi padre que estaban cerrados los públicos y ella, la "amable mujer" ha soltado que si estaban cerrados los baños pusiéramos una queja al ayuntamiento. No sé si era médico o administrativa  pero ha sido una mujer muy desagradable, que no ha empatizado conmigo para nada. Le hubiera dicho de todo. Me he vuelto encendida. Es una mujer alta, delgada y con el pelo recogido. Lo digo para si por una remota casualidad lo lee que sepa que me estoy refiriendo a ella. Y bueno, le voy ha hacer caso en una cosa...pido al alcalde que abran los wc del parque del oasis. Queda dicho y yo ya me he desahogado. (De verdad ,cuanta tontería hay en el mundo) .

Por lo demás al llegar a casa ya se me ha pasado mi enfado, he estado viendo la tele, y bien. Con mi padre estoy a partir un piñón. He tenido muchísima suerte de tenerlo como padre. Y yo me siento feliz en casa, es mi refugio, donde estoy más a gusto. Dónde puedo crear y ver el mundo bello de nuevo. me ha costado muchísimo estar como estoy hoy y aunque lo haya pasado muy mal, parece que no le importa a nadie. Pero yo sigo pidiendo y rezando por los míos, y por todo aquel que me lo pide. Y este blog ha sido un lugar perfecto para volcar mis sentimientos, y aliviar mis lágrimas. Tengo una muy buena familia, muero de amor por mis once sobrinillos. Y tengo las amistades que tengo de siempre, y algunas nuevas. Cullera es una buena playa para recargar las pilas, y he decidido que me quedo con lo bueno de la gente, pero con la gente que mejor me llevo es con mi gente, mi familia y mi grupo de amigas. Todo lo que he sufrido está ya encomendado y todo sin zascas estúpidos es más llevadero. Intento llenar mi vida con cosas positivas, con gente que vale la pena, olvidando el pasado para centrarme en mi presente con ilusión y alegría. El futuro no me lo planteo. Sencillamente, lo desconozco.

Os dejo, mañana más, si Dios quiere:

Mónica Rubio Ochoa.