Hay algo en mí que es nostalgia. Y en esa nostalgia se agolpan en mi corazón muchísimos recuerdos del ayer. ¿Qué recuerdos? Supongo que lo mismo que las demás mujeres amores, encuentros y desencuentros. Pero ahora, hoy empiezo a sentir el tiempo a mi favor. Tengo un buen presente y una ilusión por el futuro muy grande. No me rompáis los sueños, no sea que los vuestros tampoco se cumplan. Si algo he aprendido en este tiempo es que no podemos tener siempre lo que deseamos, aunque espero que en algunas cosas sí. ¿Con qué sueño? Con la paz, por ejemplo, pero empezando a ser pacíficos con nosotros mismos y con nuestro entorno, con la seguridad, no tener miedo cuando cruzas un puente por la noche, y con el amor verdadero, ese que "quita el senttñiiiiiiiiooo". Este último es el más difícil de materializar. Por lo demás va todo viento en popa, siendo una buena mujer que no desea el mal a nadie, pero desea que a ella tampoco se lo deseen. Y nada, Cullera, playa bonita, ya me voy. Besos seguidores muditosssssss:
Mónica Rubio Ochoa01-noviembre-2018
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