lunes, 31 de enero de 2022

CON TRANQUILIDAD...

Siendo como soy, una atolondrada en ciertas cosas, me he propuesto tomarme más las cosas con tranquilidad, sin agobios, con respeto por todo y por todos. Últimamente estoy mejor, casi como nunca antes, y mi mirada es limpia y serena, mi alma está en paz, y no quiero más que ser sencillamente una más, como siento que lo soy ahora, pese a todo lo pasado y todo lo perdonado. Hay que pelear por muchas cosas: por ser mejores día a día, por crecer sin complejos, por predicar la paz, por ser más bondadosos e humildes. Ojalá supieramos más de lo que queremos expresar. Pero bueno, como dije una vez yo tengo dos armas para lidiar por la vida mi "supercoco" y la palabra. Nunca he dicho mentiras, aunque tengo que decir que he obviado muchas cosas, para que ni me causaran problemas ni yo causárselos a los demás. Y sí, yo creo en la institución de la familia en general y de la mía en particular. No quiero esconderme detrás de una silla (Me contaban mis padres que cuando era pequeñita lo hacía por lo tímida que era) pero tampoco voy a hablar como si fuera la Reina de Saba: soy una mujer normal, que intenta mejorar, que me gusta hablar con mis amigas, y resolver nuestras diferencias entre todas. Me dan verdadera lástima muchas cosas que pasan en la sociedad y deberíamos ser más cuidadosos los unos con los otros. Por hoy, nada más, Garacias por leerme:
Mónica Rubio Ochoa
31-enero-2022

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