lunes, 24 de septiembre de 2018

UN cuento mío que os regalo...espero que os guste


BABÚN, EL MAGO

Babún era un triste mago a quien una vieja bruja llamada Radan le había quitado su magia años ha, en un duelo del que quedó malherido y en el que un grupo de elfos tuvo que socorrerle. Desde entonces vivía en su pequeña aldea, y aunque estaba recuperado de sus heridas, echaba mucho de menos sus años de mago. Flop era un elfo muy divertido, al que le gustaba gastar bromas, y siempre intentaba sacar una sonrisa a Babún con sus jocosos comentarios. Pero a Flop le preocupaba cada vez más Babún, porque le veía triste y sin ganas de reírle ya las gracias.

Un buen día Flop pidió audiencia con el Gran Elfo, que era el gobernante de la aldea. El Gran Elfo se interesó por lo que Flop le contaba:

-Bueno, bueno…sé de un hada bella y poderosa con sus hechizos, Se llama CARMEN, pero vive lejos de aquí. Nos conocimos hace lustros en plenas batallas de los elfos contra los trolls. Digamos, que fue una suerte tener al hada Carmen de nuestro lado. Pero no sé qué será de ella, hace tiempo que le perdí el rastro, vivía en el bosque de las brillantes luciérnagas, pero, ya te digo, de eso hace muuuucho tiempo

Os dejaré a mi caballo “Laberinto” para que podáis ir en su busca. Ordeno que los demás elfos os proporcionen comida y bebida para una semana de travesía.

Flop se puso muy contento y se fue cantando y bailando a ver a Babún. Cuando llamó a la puerta:

- ¿Quién es?

-Babún, soy Flop, ábreme, ¡rápido!

Babún se acababa de despertar de su siesta, abrió la puerta y le dijo a Flop:

-Dime, buen amigo Flop, ¿Qué se te ofrece?-

-Verás, he hablado con el gran Elfo, nos ha de dejado su caballo para ir en busca de un hada, se llama CARMEN. Ella puede ayudarte a recuperar tu magia. Los demás elfos ya están reunidos y van a ayudarnos a preparar los víveres para el viaje.

A Babún se le iluminó la cara con una gran sonrisa.

Partieron al amanecer, con Laberinto, que era un caballo castaño e impetuoso, pero muy noble. Babún se encontraba feliz y esperanzado. Todos los elfos se despidieron de ellos:

-Adiós, adiós, ¡buen viaje!

Laberinto se puso al galope camino hacia el bosque de las brillantes luciérnagas.

Tardaron cuatro días y cuatro noches en llegar al bosque. Era de noche cuando vieron aquellos frondosos árboles llenos de luces que no eran más que brillantes luciérnagas en danza sobre el aire. Pusieron pie en tierra, y en silencio entraron… el bosque era precioso, había chopos, abedules, sauces llorones, pinos…flores de todas clases: margaritas, lilas, rosas rojas y amarillas… era realmente precioso. Flop se quedó con la boca abierta, y no menos asombrados quedaron Babún e incluso Laberinto, que soltó un largo relincho. Un grupo de luciérnagas se acercaron revoloteando. Babún dijo:

-Creo que quieren que las sigamos. ¡vamos!

Y allá fueron nuestros tres amigos en una noche estrellada siguiendo a las luciérnagas, y tras unas horas, y sin esperarlo, un gran palacio. Se acercaron, y, un poco temerosos, justo cuando iban a llamar a la puerta y ¡como por arte de magia! apareció CARMEN, la más bella hada que os podáis imaginar. Tenía una túnica brillante y un cabello largo y azul que le llegaba por la cintura, y flotaba en el aire haciendo movimientos con la varita en su mano derecha.

- ¿Qué queréis, peregrinos de mi bosque? – era la voz más dulce que habían escuchado nunca

Los dos se quedaron parados un momento, hasta que Babún habló entrecortado:

-Soy un mago, bueno…hace tiempo era mago, pero una bruja, Radan,  me robó mi magia. Venimos de la aldea del Gran Elfo, mi compañero es Flop, y nuestro caballo, Laberinto.

-Ohh, el Gran Elfo, cuántas vivencias juntos, fue dura nuestra batalla pero recuerdo que logramos vencer al maligno ejército de troles años ha. En fin, supongo que no habéis venido a escuchar mis recuerdos, …e imagino que querrás recuperar tu magia…¿no es cierto?

-¿Sería eso posible?

-Bueno, os cuento, dijo Carmen, hay un pequeño problema: tendríamos que enfrentarnos a la bruja Radan, pues ella es la que tiene tu magia. ¡Habrá que arrebatársela!.

- ¿Es la única forma? Preguntaron al unísono Babún y Flop

- Es la única, la magia de cada cual es diferente y ella debe tenerla guardada en algún receptáculo. Pero tranquilos, creo que los tres haremos buen equipo. Partiremos al bosque oscuro que es donde vive la bruja.

Partieron al anochecer, el hada volando y Babún y Flop fueron galopando en el gran Laberinto.

Cansados, después de un largo trecho, pararon a comer algo a media noche. El hada se quedó dormida.

-Carmen es preciosa, tan buena o más de lo que me había imaginado- dijo Flop- ¿No crees?

-Sí, dijo Babún, ya lo creo que sí.

Y estos cuatro magníficos se quedaron dormidos, profundamente dormidos.

Al día siguiente retomaron el viaje y por fin llegaron al bosque oscuro. Escucharon un aullido

-Lobos-exclamó Flop

-Tendremos que ir con cuidado- dijo Babún.

-Tranquilos- susurró la bella hada.

El bosque oscuro estaba poblado de murciélagos. Laberinto dio un respingo.

Tranquilo- le dijo su Babún.

Por fin llegaron a un castillo de tonos grisáceos, que tenía un foso de agua de cloaca que despedía un fuerte hedor. Llegaron a la puerta, y, antes de llamar, se abrió con un chirrido. Entraron los cuatro.

-         Hola, hola, hola- ¿Quién osa perturbar mi descanso?

De repente se acercó a ellos. Era una horripilante bruja con una gran narizota, ojos hundidos y cuerpo retorcido.

Habló Babún:

-         Me robaste mi magia hace años-exclamó Babún – Quiero que me la devuelvas.

-         Tranquilo Babún- le susurró Flop – tiene cara de malas pulgas

-         Te oigo pequeño- vaya, vaya, vaya, pero ¿a quien tenemos aquí?, al hada maravillosa de las luciérnagas. Dijo Radan burlándose de ella.

-         Vamos-devuélvele la magia al mago Babún y nos iremos por donde hemos venido .No te molestaremos más.

-         Sí, sí- dijo el hada sacando un botecito trasparente con un líquido azul celeste y riéndose con una carcajada estruendosa les dijo gritando: -Toma tu magia- pero antes de devolvértela ¡me las pagaréis los cuatro! y lanzó un sortilegio: ¡que se conviertan en lagartijas! –exclamó empuñando su bastón-

Pero el hada CARMEN fue más rápida que nunca, y contraatacó con su magia antes de que el rayo del bastón de la bruja llegara a rozarla a ella y a los demás. Y con unos movimientos casi imposibles de su varita, exclamó: ¡Jamalajú- jamalajá! que ahora la bruja Radan se convierta en piedra!

De repente se hizo el silencio y se produjo un gran fogonazo. Tembló el suelo por donde pisaban y cayeron al vacío. La bruja se había convertido en una horrible escultura de oscura piedra. El hada les indicó:

-¡Salgamos! Salieron corriendo. Atravesaron el bosque oscuro y lograron salir de él vivitos y coleando. Cuando llegaron fuera, pararon a descansar.

El hada Carmen le dijo que se tomara la pócima azul a Babún. Se la tomó y sintió una fuerza interior, como maremágnum de hechizos e ideas por doquier.



Tras unos segundos, cuando Babún se había recuperado del todo, se quedó mirando a un pajarillo y le espetó:



¡Pajarillo, pajarillo, vuélvete un gato negro con colmillos!

El pájarillo se esfumó en el aire y en su lugar apareció un pequeño gato:

-Miau, miau, miau

Todos aplaudieron.

El mago se acercó al hada y le dio un fuerte abrazo:

-Gracias por todo, buena hada, me has devuelto lo que más quería. ¿Cómo podré agradecértelo?

- Ya lo has hecho. Un abrazo sincero es el mayor regalo que un hada puede recibir. Es hora de que vuelva a mi bosque, amiguitos, si me volvéis a necesitar, ya sabéis donde encontrarme-. Extendió sus alas y se alejó.

-Adiós , adiós, le gritaron Flop y Babún...adiós hada Carmen.



Y así es como termina esta pequeña historia.

Cuentan que, tras la llegada de Babún a la aldea de los elfos, mejoró mucho la vida de todos y que Babún fue, desde entonces, el gran mago al que visitaban desde otros reinos. Flop fue su ayudante y Laberinto se quedó con ellos. La magia había triunfado, y todos, menos la bruja, fueron felices por el resto de sus días. Colorín, colorado, este cuento, niños, ha terminado.

29-07-2018

Mónica Rubio Ochoa




No hay comentarios:

Publicar un comentario