Hay veces que hacemos de tripas corazón y no nos queda otra que seguir el camino que hacemos de nuestro propio destino. A veces nuestro destino no es el que queremos o buscamos, pero no podemos anclarnos en un pasado, hay que seguir e intentar ser feliz. Yo me siento contenta, mucho, de volver a esta bendita playa que es Cullera. Tengo muchas ilusiones y algunas las he cumplido ya. Me gusta hacer las cosas bien, y que la vida me devuelva lo bonito, pues era la que sufría y ahora es poco lo agradecida que estoy con mi vida. Intento ser justa, mi blog ha recogido parte de sufrimiento, pero también parte de lucha, parte de niña, y parte de mi desamor. Todo pasa, y el sol siempre vuelve a salir. Yo duermo muy bien, dice el Gran Sabio que es porque tengo la conciencia muy limpia. Eso debe ser. Ya no persigo sueños rotos, ya no toco las estrellas, pero me gusta reírme y mi buen humor ha vuelto. Soy tímida, mucho, pero eso no hace que tenga facilidad en petit comité de llevar una conversación de nivel. Y nada, ya se me cayó la venda de los ojos. Yo duermo todas las noches acurrucadita y tranquilita. Por lo demás, estoy muy feliz tal y como me encuentro. Voy a disfrutar este verano, aunque a veces tenga que descansar algún día. Y sí, me gusta hasta mi soledad compartida, porqué es la que ha hecho que escribiera mis versos y mi vida, y darme cuenta de lo muchísimo que me quiere mi padre y mis hermanos. Soy clara, siempre lo fui, pero hasta ahora nunca me había planteado cosas como que importante es la buena educación, que importante es tener amigas.
Hoy he salido con mi padre. hemos dado dos buenos paseos, Cullera es una magnífica playa, y pienso disfrutar todo lo que buenamente sé y pueda. Pido salud para todos, en especial para los miembros de mi familia. Y nada, besitos mil
Mónica Rubio Ochoa
31-marzo-2021
"La Maga"
No hay comentarios:
Publicar un comentario