EN
CAMPOS DE AMAPOLAS
Piensas
en campos de amapolas,
Rojas
como tus labios rojos
Sentimientos
delicados
Vida con
profunda alma
Piensas
en campos de amapolas
Sueñas
con volar en libertad
Te siento
cerca vida mía,
Te deseo
lo mejor.
Mi
cariño, mi amor
Mónica
Rubio Ochoa
20-mayo-2020
AL
ATARDECER (Cuento)
Al atardecer, la niña volvió
hacia su casa como todos los días, pero se perdió. Un trasgo que había por ahí
la escuchó llorar.
-¿Qué te pasa dulce niña?. Le
preguntó
-Me he perdido.
-Yo te ayudaré- le dijo el
trasgo.
La cogió de la mano y la llevó a
la casa del “hada Alegría”. Alegría abrió su puerta al llamar el trasgo. La
niña no paraba de llorar. El trasgo le contó que la había encontrado en el
bosque de los álamos. El hada dijo:
-Yo os llevo, acompañarme, y toco
el cielo con su varita y como dibujado apareció la casa de la niña.
-Seguidme, está cerca. La niña
estaba sonriendo, y el trasgo la llevaba de la mano. Llegaron por fin a su
casa. Le dijeron a la niña que guardara su secreto, el de que las hadas y los
trasgos existían. Ella prometió que no diría nada. Llamó a su casa, y sus
padres la abrazaron, muy preocupados por su tardanza. Ella guardó el secreto.
Dicen que la niña iba de vez en
cuando a llevarles comida a los seres del bosque, eso dicen, ¿vosotros que
creéis amiguitos?
Mónica
Rubio Ochoa
25-nov.-19
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